Es la más grandes de las serpientes de la Isla de La Hispaniola que comparte República Dominicana y Haití, los adultos pueden llegar a medir entre 2 metros y 2.5 metros SLV. Es endémica de la Hispaniola, pero también habita en sus islas satélites como La Tortuga, Saona, Île de la Gonâve. Habitan en casi toda la isla, pero es más frecuente encontrarlas en los pinares y bosques tropicales con densa vegetación, terrenos de hierbas altas y cuencas de los ríos. Anteriormente se trataba como una especie nativa, por entenderse que era la misma especie de las Islas Bahamas, Henderson y Powell (2009) que representaba la antigua subespecie Chilabothrus striatus strigilatus, elevada a estado de especie por Reynolds et al. (2013), por tanto siendo especies diferentes. De igual forma antiguamente se conoció como Epicrates striatus, pero el género aceptado en la actualidad es Chilabothrus de A. M. C. Duméril & Bibron 1844, también es sinónimo de Homalochilus striatus (Fischer 1956). Existen tres subespecies registradas, a) Chilabothrus striatus strigilatus (Fischer 1856) o Boa de montaña dominicana, b) Chilabothrus striatus exagistus (Sheplan & Schwartz, 1974) o Boa de la península del Tiburón y c) Chilabothrus striatus warenni (Sheplan & Schwartz, 1974) o Boa de la Isla Tortuga. Powell, R. & Incháustegui, S.J. (2009).
Sus escamas se presentan en filas dorsales en el cuello 34-49, en la mitad del cuerpo 35-65; ventrales 270-299 en machos, 266-298 en hembras; subcaudales 76-102 en machos, 76-94 en hembras; ventrales + subcaudales 353-390 en machos, 343-387 en hembras; Fórmula de escala de cabeza 3 / 5-1 / 2-5. Schwartz y Henderson (1991: 609).
Su coloración dorsal es marrón pálido, gris o rojo ladrillo, presenta manchas aovadas o anguladas de color canela, gris o marrón con bordes negros a lo que debe el nombre de “culebra jabá”. Siendo estas manchas de la siguiente manera, pueden presentar entre 60-122 manchas corporales, pero frecuentemente sin un patrón en el dorso o con manchas tan fusionadas que son incontables; estas pueden ser manchas, rombos o manchas grises, tostadas o marrones, delineadas o no por marrón oscuro a negro sobre fondo marrón más pálido, gris o marrón rojizo; manchas más o menos sub-circulares, ovadas a anguladas, a menudo modificadas, por alternancia, en un patrón en forma de cadena, monturas o bandas; generalmente una serie secundaria de manchas angulares más pequeñas en los lados inferiores, que se encuentran en los ápices de las manchas dorsales primarias; la franja lateral del cuello puede ser muy prominente, extendiéndose el tercio anterior del cuerpo en algunos especímenes, pero débilmente desarrollada en otros; parte superior de la cola con 0-28 manchas, pero puede ser de color marrón oscuro sólido a negro; venter crema, gris o marrón, con marcas dispersas a marrón oscuro regular a gris oscuro que forman líneas cortas longitudinales, segmentos de línea o manchas rectangulares. Schwartz y Henderson (1991: 609).
Son una familia de serpientes constrictoras, es decir que matan a sus presas por constricción, encerrándolas en sus anillos. Se alimentan de roedores, aves, lagartijas o lagartos, regularmente cada dos días. En la actualidad la Boa de la Española se alimenta de aves y roedores exóticos, su dieta ha cambiado gradualmente de los mamíferos nativos o endémicos a los introducidos por la extinción o merma de los nativos no volantes como (Brotomys, Isolobodon y Plagiodontia) e insectívoros. (Nesophontes). La dieta de E. striatus a especies exóticas como los ratones Mus musculus. y Rattus rattus convirtiéndose en las especies de presa predominantes en la dieta de esta serpiente. Henderson, Robert. (1984); Ottenwalder, J. A., Henderson, R. W., Schwartz, A., & Noeske-Hallin, T. A. (1987).
La época de reproducción es a partir de mediados de diciembre hasta mediados de abril; la temperatura debe ser de 10 ° a 15 ° menor por la noche, durando unos 200 a 230 días el periodo de gestación, dando a luz entre 12 y 30 crías, recordando que son ovovivíparas. A ambos lados de la cloaca presentan espolones, que son vestigios de las patas posteriores locomotoras. Tolson, P. J. (1992); Henderson, R. W., & Powell, R. (2009).
Publicado por Henry Abreu Domínguez, 0000-0002-2345-3462
3 de junio del 2015.
Foto: Pedro Genaro Rodríguez |
Foto: Jorge Luis Brocca |
Foto: Jorge Luis Brocca |
BIBLIOGRAFÍA.
Henderson, R. W., & Powell, R. (2009). Natural history of West Indian reptiles and amphibians (p. 496). Gainesville: University Press of Florida.
Henderson, Robert. (1984). The diets of Hispaniolan colubrid snakes. Oecologia. 62. 234-239. 10.1007/BF00379019.
Ottenwalder, J. A., Henderson, R. W., Schwartz, A., & Noeske-Hallin, T. A. (1987). On the diet of the boa Epicrates striatus on Hispaniola, with notes on E. fordi and E. gracilis. Amphibia-Reptilia, 8(3), 251-258.
Powell, R. & Incháustegui, S.J. 2009. Conservation of the herpetofauna of the Dominican Republic. Applied Herpetology 6: 103–122.
Schwartz and Henderson (1991) Amphibians and Reptiles of the West Indies: Descriptions, Distributions, and Natural History. University Press of Florida; First edition. 714 pp.
Tolson, P. J. (1992). The reproductive biology of the Neotropical boid genus Epicrates (Serpentes: Boidae). In Reproductive biology of South American vertebrates (pp. 165-178). Springer, New York, NY.